‘Five Feet Apart’ (‘A Dos Metros de Ti’ en Latinoamérica) narra la historia de Stella y Will, dos adolescentes que, al conocerse, comienzan a enamorarse; sin embargo, su amor tiene un reto mayor al de cualquier otro romance: no pueden tener contacto físico debido a su condición médica, fibrosis quística.

Por la enfermedad, que ambos padecen, deben seguir una única regla: mantenerse alejados a una distancia mínima de dos metros. A pesar de este impedimento, la conexión entre estos dos jóvenes se intensifica, y el deseo de ambos de vivir la vida sin límites es cada vez más fuerte.

El título de la película proviene de la regla de “los dos metros”, una directriz establecida por la Cystic Fibrosis Foundation que dice que dos pacientes con este tipo de patología deben mantenerse separados, a una distancia mínima de seis pies -equivalente a dos metros-, para minimizar el riesgo de infección cruzada.

Haley Lu Richardson (The Edge of Seventeen, Split) y Cole Sprouse (Riverdale) son los encargados de encarnar a los dos jóvenes pacientes que se aman, a pesar de no poder tener contacto físico, enfrentando a la muerte en caso de decidir retar las normas.

‘Five Feet Apart’, dirigida por Justin Baldoni (My Last Days), cuenta además con la participación de Claire Forlani (Meet Joe Black), Parminder Nagra (ER, Birdbox) y el colombiano Moisés Arias, quien actúa en ‘Monos’ (cinta premiada en el Festival de Cine de Sundance y que participará en la próxima edición del Festival Internacional de Cine de Cartagena de Indias).

La producción de la película trabajó junto a Claire Wineland, una paciente y vocera de fibrosis quística. Ella estuvo junto a los actores hasta su fallecimiento el pasado mes de septiembre. En su honor se creó la Fundación Claire’s Place, un grupo que busca la visibilización y conocimiento de la fibrosis quística en niños, jóvenes y sus familias.

Cerca de setenta mil personas en todo el mundo padecen fibrosis quística (uno de cada cinco mil colombianos nace con esta condición), una enfermedad que generalmente se diagnostica a una edad temprana; la misma patología que sufren los protagonistas de la película: Stella, Will y Poe (Moisés Arias), el mejor amigo de Stella. 

Es un trastorno genético progresivo sin cura conocida, que se caracteriza por afectar las zonas del cuerpo que producen secreciones. Causa infecciones pulmonares constantes y dificultad para respirar. También puede llegar a darse en otras partes del cuerpo como el hígado, páncreas y sistema reproductivo. La esperanza de vida es de 40 años.

Aunque no hay cura, sí existen tratamientos para sus síntomas. Recientemente, un equipo de científicos españoles desarrolló un dispositivo inteligente que facilita detectar esta enfermedad, a través de una batería de papel que prende las primeras alarmas, y así comenzar un tratamiento adecuado.